Cómo una decisión de la Corte Suprema de Justicia afecta el agua limpia para todos
El 25 de mayo de 2023, la Corte Suprema de Justicia de los Estados Unidos emitió una decisión en el caso Sackett v. EPA que redujo significativamente la autoridad de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) para proteger los humedales y vías fluviales del país.
La Agencia de Protección Ambiental estima que este fallo elimina las protecciones federales de hasta el 63% de los humedales, amenazando la protección de aproximadamente 4,9 millones de millas de arroyos y el agua potable para millones de estadounidenses.
Eliminar estas protecciones federales y la capacidad de la EPA para salvaguardar las aguas en todo el país le da rienda suelta a los grandes contaminadores, industrias, constructores y organizaciones que se oponen a la regulación para proteger nuestras aguas.
Esto significa que la mayoría de las vías fluviales y humedales de la nación están amenazadas actualmente por:
• Químicos, aguas residuales y otros contaminantes de industrias y negocios.
• Flujos de arroyos obstruidos.
• Arroyos contaminados por minas.
• Humedales contaminados o dañados por construcciones en desarrollo.
Antes de este fallo judicial, los propietarios de terrenos, compañías y constructores tenían que obtener un permiso federal de la Ley de Agua Limpia antes de drenar o hacer uso de las aguas protegidas, incluidos los humedales.
Ahora, 220.000 millas de arroyos que fluyen estacionalmente están en riesgo.
Si bien esta decisión afecta a todos sin importar raza o código postal, está bien documentado que la contaminación del agua, la contaminación industrial, la falta de infraestructura hídrica y los desastres climáticos -como las inundaciones- han impactado históricamente a las comunidades de bajos ingresos y de color de manera desproporcionada.
Según diferentes investigaciones, aproximadamente el 29% de los latinos viven a menos de tres millas de un sitio Superfund. De acuerdo con la Agencia de Protección Ambiental, los “superfunds” son los sitios más contaminados del país debido a las actividades de entidades como fábricas, plantas de procesamiento, y proyectos mineros, exponiendo a estas comunidades a agua contaminada y aumentando el riesgo de problemas de la salud, incluyendo cáncer.
Un estudio de Environmental Science & Technology utilizó datos de 7.873 sistemas de agua comunitaria en 18 estados, y encontró que las personas de color, incluidos los latinos, tienen más probabilidades de estar expuestas a sustancias químicas sintéticas altamente tóxicas en sus suministros de agua.
La eliminación de las protecciones a las aguas del país debido a la decisión de la Corte Suprema amenaza a estas comunidades vulnerables que ya están sufriendo las consecuencias de la contaminación de este recurso vital.
Durante 51 años, la Ley de Agua Limpia ha tenido como objetivo prevenir, reducir y eliminar la contaminación y destrucción de nuestras aguas para "restaurar y mantener la integridad química, física y biológica de las aguas de la nación".
El agua limpia también es necesaria para las empresas y diferentes sectores, incluidos la recreación al aire libre, la hotelería, el turismo y la agricultura.
Los humedales contribuyen a la salud del suelo y proporcionan agua para riego, apoyando las actividades agrícolas. La protección de los humedales garantiza un entorno sostenible para la agricultura, una industria donde la mayoría de los trabajadores son Hispanos.
Asimismo, la pérdida de humedales pone a nuestras comunidades, ranchos y granjas en mayor riesgo de sufrir inundaciones, sequías e incendios forestales. Los humedales actúan como esponjas naturales, absorbiendo el exceso de agua durante las fuertes lluvias.
Mientras el Congreso da un paso adelante con la Ley de Agua Limpia de 2023 para restaurar la protección del 50% de los humedales y el 70% de los arroyos perdidos con la decisión de la Corte Suprema, es necesario que los estados llenen ese vacío con legislaciones y regulaciones locales para salvaguardar las aguas de la contaminación de industrias, minería y construcción, como ya hizo Colorado.
¡Es hora de restaurar el agua limpia para todos!